miércoles, 11 de mayo de 2011

Fecha de caducidad


¿Has escuchado que para comprar un producto primero debes fijarte bien en la fecha de caducidad? Pero sean francos cuántos de ustedes lo hacen? ¿Van al súper y pacientemente toman unos segundos más para voltear el producto y revisar si está pasado o pronto vencerá y ya no servirá? Es poco probable que lo hagan
¿Por qué comienzo con tanta pastrulada este posteo? Creo que hoy desperté más pastrula que nunca, o que hay algunas dudas que ni el gogglear las resuelve. Y es que hoy me di cuenta que hay amores que nacen con la fecha de caducidad impresa, y lo peor de todo es que lo sabemos y no nos importa.
Y no me refiero a que tienes en mente que hay cosas que no duran para siempre y que en algún momento todo ese romance terminará. No, no es eso, me refiero a cuando sabes perfectamente que ese amor tan bonito, tan lindo que has aceptado comenzar tiene fecha y hora marcada para terminar.
Pero aún así en tu momento de mayor arrojo, de valentía o de mayor estupidez aceptas y te entregas de lleno. Porque quieres sentir que por una vez fuiste amiga de la felicidad, porque aún cuando acabe todo y los recuerdos te acompañen, quieres poder decir que fuiste dueña de un amor bonito. Y es entonces que la fecha de caducidad importa un bledo. Qué importa que vaya a durar poco si vas a experimentar por un momento lo que es bello. Entonces tus dudas bajan un poco su volumen para dejarte escuchar el sonido de tu celular, que te anuncia un nuevo mensaje. Y mientras lo lees y dices: “que atorrante”. Te das cuenta que la visa de tu cariño ya fue finalmente entregada.
(Algo profético fue este posteo)

No hay comentarios.:

Publicar un comentario